Los participantes de la 60ª edición del Rally Barcelona-Sitges han disfrutado de uno pica-pica en el poblado marinero mientras los visitantes contemplaban las joyas automovilísticas
Como ya es tradición el Puerto de Sitges-Aiguadolç es uno de los principales puntos de parada del Rally Barcelona Sitges de coches de época. El 4 de marzo empezaba la marcha a las diez y media de la mañana con la bajada de bandera, a cargo de las autoridades de los ayuntamientos de Sitges y Barcelona. La prueba continuó el itinerario habitual por Barcelona enlazando con las Costas del Garraf, uno de los atractivos de este acontecimiento reconocido internacionalmente y que es seguido por miles de forofos a lo largo de todo su recorrido.
La caravana, con un centenar de vehículos, completó la primera etapa en el Puerto de Sitges-Aiguadolç a las doce y media, donde los participantes disfrutaron de un pica-pica en la plaza del poblado marinero mientras los visitantes y curiosos podían disfrutar de un buen rato contemplando los coches y motos de época en primera línea, con Rolls Royce, Buick, Elizalde, Ford T, Hispano Suiza y Matchless de 1920 entre muchos otros. Posteriormente el Rally salió del Puerto para dirigirse al final de etapa en el parque cerrado de La Fragata, bajo la Parroquia de Sant Bartomeu y Santa Tecla donde los vehículos permanecieron expuestos al público hasta las cinco de la tarde. Los conductores y acompañantes disfrutaron de un almuerzo de gala durante el cual el jurado de expertos entregaron los premios a los cinco participantes más elegantes, a las tres mejores motocicletas y a los tres automóviles más destacados según su fecha de fabricación.